FERNANDO G. MURIEL
Hoy comienza en el Centro de salud de Arévalo la campaña de vacunación contra la gripe y el neumococo de 2008, que bajo el lema "Stop a la gripe" se extenderá desde hasta el próximo 21 de noviembre. De igual forma la Consejería de Sanidad pondrá en marcha de forma paralela otra campaña específica de vacunación para los profesionales sanitarios, que por su cercanía a los enfermos pueden contagiarse y transmitir ellos, a su vez, la gripe a otros pacientes.
Para las autoridades sanitarias de nuestra región la gripe no es sólo un problema de salud pública sino también de tipo económico por el absentismo laboral que produce, aunque las complicaciones gripales son más frecuentes en personas mayores de 60 años, y sobre todo por encima de las de 75.
La gripe, que se presenta cada año en los meses fríos de invierno, es altamente contagiosa y se transmite fácilmente por vía aérea a través de las gotitas que se eliminan al hablar, toser o estornudar. También puede transmitirse, con mucha menor frecuencia, por contacto directo con superficies recientemente contaminadas por el virus, como tocar las manos de un enfermo y posteriormente llevarse las manos a la boca o a la nariz, según fuentes de la Consejería de Sanidad.
En caso de padecer gripe se recomienda descansar, beber abundantes líquidos, evitar el consumo de tabaco y alcohol, no tomar antibióticos sin prescripción médica y utilizar los servicios sanitarios de forma racional.
La infección por neumococo se transmite también por mecanismo directo de persona a persona, por vía respiratoria, como consecuencia de un contacto íntimo prolongado, según las mismas fuentes sanitarias.
Durante la presente campaña de vacunación regional, la Junta de Castilla y León mantiene la vacuna contra el neumococo a la población a partir de los 60 años.
La vacuna contra la gripe, ya que el subtipo de virus cambia de un año a otro, debe ser anual, mientras que la del neumococo - que puede afectar al sistema pulmonar y protege frente a 23 tipos de bacterias que cubren el 90 por ciento de la enfermedad invasora- sólo se administra generalmente una vez en la vida.
En la vacunación contra la gripe la población diana agrupa a los mayores de 60 años y a quienes pertenezcan a algún grupo de riesgo.
Así, quedan comprendidos en este grupo los adultos y niños mayores de seis meses que padezcan enfermedades crónicas; niños y adolescentes, de seis a dieciocho años, que reciban tratamientos prolongados con ácido acetilsalicílico; mujeres embarazadas y personas institucionalizadas. También se recomienda la vacunación a grupos que puedan transmitir la gripe a personas de riesgo; a trabajadores de servicios esenciales para la comunidad; empleados de granjas y mataderos y personal de educación.
La administración conjunta de la vacuna antineumocócica y antigripal potencia su actividad, según fuentes de la Consejería de Sanidad, la cual ha precisado que la vacunación de estos grupos de estos grupos poblacionales y de riesgo residente es universal y gratuita.
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