FERNANDO G. MURIEL La compañía salmantina Spasmo Teatro pone esta noche en escena en el Cine-Teatro "Castilla" la obra Sketching. La obra se enmarca dentro del programa CIrcuitos Escénicos organizado por la Junta de Castilla y León en conjunto con el ayuntamiento de la ciudad.
En 1992 cinco doceañeros conocidos como “Los Colegas de la vega” irrumpen con éxito en el Gran Café Teatro de la Vega, espectáculo de variedades que se desarrolla en Salamanca desde hace más de veinte años. La juventud y el desparpajo de los humoristas sorprenden al publico que días más tarde abarrotará por dos veces el teatro para ver el estreno de su primer montaje dirigido por Maribel Iglesias “A cuatro leguas de pinto... la verdadera”, donde se puede ver tanto la faceta cómica como el ingenio de los cinco componentes. Así comienza la andadura por los escenarios de los actores que años más tarde pasarán a fundar SPASMO, apostando por el humor y haciendo del gesto y el teatro visual su seña de identidad.
Desde sus comienzos se realizan múltiples trabajos que compaginan con sus actuaciones de sala. Colaboran con infinidad de grupos de teatro y participan en distintos proyectos de calle y animaciones conjuntamente y en solitario, actividades que aportan infinidad de recursos a la compañía y una enorme experiencia en el trato con el público.
Sus continuas intervenciones en el café teatro fructifican en octubre de 1994 con su montaje Comiexlástico, repleto de elementos puramente visuales de comunicación inmediata con el público, directamente emparentados con el mimo. Tanto por su nombre como por su contenido escénico responden a la medida síntesis de los tres espectáculos más paradigmáticos de El Tricicle: Manicomic, Exit y Slastic, con el que demuestran cómo el verdadero talento logra hablar sin dialogar. Con este admirativo homenaje al trío cómico catalán ganan el Primer Premio del III Certamen de Teatro Lauro Olmo, así como el Premio a la mejor Dirección, y empiezan a darse a conocer en el panorama nacional e internacional actuando en ciudades como Salamanca, Oporto o Zamora.
Desde sus comienzos se realizan múltiples trabajos que compaginan con sus actuaciones de sala. Colaboran con infinidad de grupos de teatro y participan en distintos proyectos de calle y animaciones conjuntamente y en solitario, actividades que aportan infinidad de recursos a la compañía y una enorme experiencia en el trato con el público.
Sus continuas intervenciones en el café teatro fructifican en octubre de 1994 con su montaje Comiexlástico, repleto de elementos puramente visuales de comunicación inmediata con el público, directamente emparentados con el mimo. Tanto por su nombre como por su contenido escénico responden a la medida síntesis de los tres espectáculos más paradigmáticos de El Tricicle: Manicomic, Exit y Slastic, con el que demuestran cómo el verdadero talento logra hablar sin dialogar. Con este admirativo homenaje al trío cómico catalán ganan el Primer Premio del III Certamen de Teatro Lauro Olmo, así como el Premio a la mejor Dirección, y empiezan a darse a conocer en el panorama nacional e internacional actuando en ciudades como Salamanca, Oporto o Zamora.
Este espectáculo marca la línea dramática de la compañía, que en octubre de 1996 y sobre un guión del propio grupo, estrenan "Ojalemos que aplausan". Un espectáculo de entretenimiento sin cortapisas, divertido y directo, humor en su más puro estado, con el que obtienen el Primer Premio, el Premio a la mejor Dirección, y el Premio a la mejor Escenografía del V Certamen de Teatro Lauro Olmo. "Ojalemos que aplausan" giró con con gran éxito, entrando en redes de teatro tan importantes como la de Madrid, Pais Vasco o Castilla y León. ·· En mayo de 2002 estrenan su primer espectáculo como SPASMO titulado "A Fiestro y Liniestro", donde cuentan con la dirección de Jordi Purtí. Se trata sin duda el espectáculo más técnico de la compañía, donde además del minucioso tratamiento del gesto, hay que destacar la compenetración y el trabajo de los actores. Un encuentro con el gag en estado puro a lo largo de ochenta minutos plagados de infinidad de matices, de la más depurada técnica, y que demuestran una inagotable fuente de recursos dramáticos y escénicos muy cercanos al cine.
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