AREA 11
Bosco de Árevalo y Briviesca empataron ayer sin goles en un encuentro que pudo, o debió, acabar con triunfo local. Y es que fue el Briviesca el equipo que dominó siempre sobre el terreno de juego y el que dispuso de ocasiones sobradas para haberse llevado los tres puntos. Sin embargo, hay tarde en que la pelota no quiere entrar en la portería y ayer fue, claramente, una de ellas. Los locales no aprovecharon sus numerosas ocasiones y al final lo pagaron dejándose dos puntos en un choque en el que hicieron méritos para ganar. Mientras, el Bosco Árevalo dispuso de una sola ocasión de gol en todo el partido, que fue un monologo de los burebanos, con numerosas ocasiones y una gran solvencia atrás.
Ya desde el primer minuto de partido los locales dejaron claro que no iban a ceder el balón al contrario. El Briviesca quería jugar y no tardó en hacerse con el control del esférico ante un rival directo. Así, cuando tan solo se habían disputado cinco minutos de partido, llegaba el primer aviso de los locales en una falta botada por Balta, que Pibe remataba alto.
La presión del Briviesca era constante ante un Bosco de Árevalo cerrado atrás que apenas sí tenía capacidad para repeler todos los ataques locales y así, un minuto mas tarde, Saúl disponía de otra buena ocasión para los burebanos, pero no fue capaz de culminar un contragolpe. Tampoco consiguió inaugurar el marcador Ivi, al cuarto de hora de partido, cuando con el portero ya batido envió fuera.
El dominio local era evidente y las ocasiones se sucedían, todas en el área visitante. Solo en un error local, Keko cogió la espalda a la defensa y de tiro cruzado rozó el poste. Esta sería la única ocasión visitante de todo el partido. El Briviesca lo intentó a balón parado, pero todos los remates o se iban fuera o eran repelidos por Mellizo.
El Briviesca lo intentó a balón parado, pero todos los remates o se iban fuera o eran repelidos por Mellizo.
Tras el paso por los vestuarios las cosas continuaron igual. El Bosco seguía sin encontrar la manera de salir de su área con el balón controlado y permanecía atrás, achicando balones. Mientras, el cuadro local buscaba la victoria con ahínco y los visitantes se defendían como podían perdiendo tiempo cuando era necesario.
El Briviesca generaba mucho peligro y cada balón al área soriana era una ocasión de gol, pero la suerte no estaba ayer con los burebanos. Ni siquiera cuando el técnico local apostó el todo por el todo quitando del terreno de juego a un defensa y dando entrada a un delantero mas. El Briviesca tenía el balón y llegaba al área contraria, pero no conseguía meterla. Parecía mas cuestión de temple que de buen juego ya, aunque los locales no desfallecieron. Eso sí, con el paso de los minutos y el cansancio acumulado las llegadas burebanas fueron espaciándose en el reloj, aunque en el minuto 86 los locales pudieron haber firmado el gol en la que fue sin duda su mejor ocasión. Pero Balta, tras una bonita jugada por la banda, enviaba al larguero un fuerte disparo. Aún hubo tiempo para otro intento mas de los locales, pero tampoco Arce estuvo acertado cuando el choque agonizaba, y su disparo se marchaba alto.
Al final, empate a cero que casi sabe a victoria a un Bosco de Árevalo que apenas lo intentó, pero que no dejó contentos a los locales, que lo dieron todo, lo intentaron hasta la saciedad y merecieron mejor suerte.
Bosco de Árevalo y Briviesca empataron ayer sin goles en un encuentro que pudo, o debió, acabar con triunfo local. Y es que fue el Briviesca el equipo que dominó siempre sobre el terreno de juego y el que dispuso de ocasiones sobradas para haberse llevado los tres puntos. Sin embargo, hay tarde en que la pelota no quiere entrar en la portería y ayer fue, claramente, una de ellas. Los locales no aprovecharon sus numerosas ocasiones y al final lo pagaron dejándose dos puntos en un choque en el que hicieron méritos para ganar. Mientras, el Bosco Árevalo dispuso de una sola ocasión de gol en todo el partido, que fue un monologo de los burebanos, con numerosas ocasiones y una gran solvencia atrás.
Ya desde el primer minuto de partido los locales dejaron claro que no iban a ceder el balón al contrario. El Briviesca quería jugar y no tardó en hacerse con el control del esférico ante un rival directo. Así, cuando tan solo se habían disputado cinco minutos de partido, llegaba el primer aviso de los locales en una falta botada por Balta, que Pibe remataba alto.
La presión del Briviesca era constante ante un Bosco de Árevalo cerrado atrás que apenas sí tenía capacidad para repeler todos los ataques locales y así, un minuto mas tarde, Saúl disponía de otra buena ocasión para los burebanos, pero no fue capaz de culminar un contragolpe. Tampoco consiguió inaugurar el marcador Ivi, al cuarto de hora de partido, cuando con el portero ya batido envió fuera.
El dominio local era evidente y las ocasiones se sucedían, todas en el área visitante. Solo en un error local, Keko cogió la espalda a la defensa y de tiro cruzado rozó el poste. Esta sería la única ocasión visitante de todo el partido. El Briviesca lo intentó a balón parado, pero todos los remates o se iban fuera o eran repelidos por Mellizo.
El Briviesca lo intentó a balón parado, pero todos los remates o se iban fuera o eran repelidos por Mellizo.
Tras el paso por los vestuarios las cosas continuaron igual. El Bosco seguía sin encontrar la manera de salir de su área con el balón controlado y permanecía atrás, achicando balones. Mientras, el cuadro local buscaba la victoria con ahínco y los visitantes se defendían como podían perdiendo tiempo cuando era necesario.
El Briviesca generaba mucho peligro y cada balón al área soriana era una ocasión de gol, pero la suerte no estaba ayer con los burebanos. Ni siquiera cuando el técnico local apostó el todo por el todo quitando del terreno de juego a un defensa y dando entrada a un delantero mas. El Briviesca tenía el balón y llegaba al área contraria, pero no conseguía meterla. Parecía mas cuestión de temple que de buen juego ya, aunque los locales no desfallecieron. Eso sí, con el paso de los minutos y el cansancio acumulado las llegadas burebanas fueron espaciándose en el reloj, aunque en el minuto 86 los locales pudieron haber firmado el gol en la que fue sin duda su mejor ocasión. Pero Balta, tras una bonita jugada por la banda, enviaba al larguero un fuerte disparo. Aún hubo tiempo para otro intento mas de los locales, pero tampoco Arce estuvo acertado cuando el choque agonizaba, y su disparo se marchaba alto.
Al final, empate a cero que casi sabe a victoria a un Bosco de Árevalo que apenas lo intentó, pero que no dejó contentos a los locales, que lo dieron todo, lo intentaron hasta la saciedad y merecieron mejor suerte.
Briviesca: Adrián, Alberto, Álvaro, Morales (Portu, 55´), Balta, Pibe, Mata, óscar (Igor, 80´), Ibi, Arce, Saúl (Diego, 60´)
Bosco de Arévalo: Mellizo, Gustavo, Javi, Monchi, Jorge (Garzón, 58´), Sergio, Tito, Hugo (Isma, 88´), Patón (Killo, 71´), Keko, Seidan.
Árbitro: Romera Hernández, de Soria. Amonestó por los locales a Arce, Saúl y Diego. Y por los visitantes a Tito y a Seidan. Expulsó por doble amarilla al visitante Javi (m. 82).
Campo: Municipal de Deportes . 100 espectadores