miércoles, 5 de noviembre de 2008

La asociación “Amigos de Madrigal” denuncia la creación de un vertedero junto al convento de Extramuros

FERNANDO G. MURIEL
La Asociación Amigos de Madrigal ha denunciado que desde principios del mes de octubre, se están almacenando en la fachada principal del convento de Extramuros de Madrigal de las Altas Torres decenas de sacos de cebollas en avanzado estado de descomposición. Para los miembros de esta asociación además de la imagen tan desagradable que genera el amontonamiento de residuos orgánicos junto a un edificio que fue declarado Bien de Interés Cultural el 22 de febrero de 2007, también podría generará un posible problema de salud pública.
La asociación desde hace años lleva denunciando la existencia de un vertedero en la parte posterior del que fuera convento de Agustinos, algo que, como ellos denuncian jamás ha sido retirado. De hecho, las únicas labores de adecentamiento del monumiento y su entorno fueron las que tuvieron lugar el pasado mes de mayo, cuando los miembros de la Amigos de Madrigal realizaron para la exposición que tuvo lugar en esas fechas, llevando a cabo tareas de de limpieza en el monumento
La asociación Amigos de Madrigal además de denunciar el estado de abandono del monumento y su entorno, exige tanto a los los responsables de las diferentes administraciones públicas como a los propietarios del monasterio en el que murió Fray Luís de León que se cumpla la ley de Patrimonio y se preguntas que quién protege este monumento, qué para que ha servido declararlo Bien de Interés Cultural, cuánto tiempo tendrá que esperar la villa para que se intervenga en el inmueble y así evitar su ruina, o que labor hacen los políticos para defender este elemento del patrimonio histórico artístico de Madrigal de las Altas Torres. De Esta forma critican el estado de abandono de unos de los emblemas no sólo de la provincia abulense, sino de toda Castilla y León.

Convento
El convento de San Agustín o de Extramuros de Madrigal de las Altas Torres se fue fundado en 1353, según privilegio de Alfonso XI, primero fue monasterio de Monjas y luego reedificado en el último tercio del siglo XVI, en estilo herreriano bajo el patrocinio de Gaspar de Quiroga, Cardenal y Arzobispo de Toledo, siendo arquitecto Nicolás de Vergara el Mozo.
Allí murió Fray Luis de León y aún se conoce como su celda un departamento sobre el costado izquierdo del presbiterio de la iglesia. Tras la desamortización, se produce su decadencia y abandono y en la actualidad se utiliza como silo de grano.
De lo que fuera convento de San Agustín, no se conservan restos de la estructura horizontal original, y los muros se yerguen solitarios. El cuerpo de entrada, se configura como una crujía simple sin divisiones, en el muro Este, la fachada en fábrica de ladrillo sobre un zócalo de granito, contiene la portada compuesta por tres arcos de piedra con escudo cardenalicio. Sobre ésta, se conservan restos de la segunda planta, de ladrillo. El claustro, limita por el lado Este con el cuerpo de entrada, por el Sur con la Iglesia, y por el Norte y Oeste con lienzos exentos de muro.
La fachada del claustro es de sillería de granito de dos plantas, la iglesia, de traza jesuítica es una construcción de ladrillo con nave central de 10 metros, ocho capillas, crucero, presbiterio corto y dos sacristías. La portada es de tres cuerpos, el central enmarcado por lo que debieran ser dos torres, con arco de medio punto y presidido por la estatua del santo.En el extremo Norte, se conservan restos del torreón de tres cuerpos que rematada la monumental fachada. Del resto de las dependencias, sólo quedan sus huellas en los derrumbes y restos de cimientos.

No hay comentarios: