FERNANDO G. MURIEL
El MUP-Republicanos saluda la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, en respuesta al recurso del G. M. del PSOE, de anular los acuerdos de los Plenos del 31 de diciembre de 2007 y 16 de enero de 2008 en los que se aprobaron las ordenanzas fiscales y se creó un nuevo impuesto: la “Tasa por depuración y/o vertido de aguas negras, residuales y pluviales”.
Para la formación republicana el problema no es sólo que se aprobara el expediente “antes de que terminase el periodo para que se presentasen alegaciones”, una de las cuales era de nuestra organización, sino que dicho expediente se elevó para su publicación en el BOP de Ávila sin haber sido aprobado por el Pleno del 31 de diciembre. Entienden también aquí, que la Diputación Provincial ha cometido, cuando menos, una irregularidad al dar curso en el B.O.P. de Ávila a unos acuerdos que no habían sido legalmente aprobados y “contrarios a derecho”.
El equipo de Gobierno, con el Alcalde a la cabeza, necesitaba colar como fuese y que tuviera para el año 2008 curso legal, incluso saltándose a la torera el más mínimo precepto democrático, una fiscalidad harto regresiva, sobre todo la nueva “Tasa de Depuración” que iba a afectar especialmente al bolsillo de nuestros convecinos.
El Gobierno municipal del PP y el señor Jaramillo, pues, han violado las más elementales normativas de toda corporación local y atentan contra su más básico funcionamiento democrático. Mas, también atenta contra la misma democracia al mentir conscientemente a los ciudadanos sobre la “Tasa de Depuración” con el objetivo de ocultarles la verdad y evitar la denuncia política ciudadana: mintió en su Bando municipal y en el Pleno del día 31 de diciembre, cuando negaba que la factura del agua fuese a subir a casi el doble, cosa que el MUP-R y el G.M. del PSOE afirmábamos y que hoy día todo el mundo ha comprobado. Además, el Alcalde ordenó tapar con su Bando municipal unos primeros carteles y mandó arrancar otros segundos en los que el MUP-Republicanos informaba de ello y pedían la “derogación de la tasa de depuración”, la “reducción del sueldo del Alcalde” y “unos impuestos justos”.
De igual forma MUP Republicanos considera que el alcalde al resolver no cumplir el plazo de alegaciones y aprobar sin aprobar por el Pleno las ordenanzas fiscales, a sabiendas que es manifiesta injusticia, podría haber incurrido en prevaricación. Actitud en la que hoy día se reafirma afirmando cínicamente que el problema “está subsanado”.
El MUP-R considera, en atención a la citada sentencia y a la justicia, que se tiene que devolver a los ciudadanos la cantidad cobrada por la Tasa de Depuración, y ante la posibilidad de que la misma pueda “tener un efecto nulo” y se tenga que “volver a aprobar en un nuevo pleno”, según el Alcalde, el MUP-Republicanos hace un llamamiento a los ciudadanos a movilizarse y acudir al mismo, si se convoca, exigiendo su derogación.
El MUP-Republicanos saluda la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, en respuesta al recurso del G. M. del PSOE, de anular los acuerdos de los Plenos del 31 de diciembre de 2007 y 16 de enero de 2008 en los que se aprobaron las ordenanzas fiscales y se creó un nuevo impuesto: la “Tasa por depuración y/o vertido de aguas negras, residuales y pluviales”.
Para la formación republicana el problema no es sólo que se aprobara el expediente “antes de que terminase el periodo para que se presentasen alegaciones”, una de las cuales era de nuestra organización, sino que dicho expediente se elevó para su publicación en el BOP de Ávila sin haber sido aprobado por el Pleno del 31 de diciembre. Entienden también aquí, que la Diputación Provincial ha cometido, cuando menos, una irregularidad al dar curso en el B.O.P. de Ávila a unos acuerdos que no habían sido legalmente aprobados y “contrarios a derecho”.
El equipo de Gobierno, con el Alcalde a la cabeza, necesitaba colar como fuese y que tuviera para el año 2008 curso legal, incluso saltándose a la torera el más mínimo precepto democrático, una fiscalidad harto regresiva, sobre todo la nueva “Tasa de Depuración” que iba a afectar especialmente al bolsillo de nuestros convecinos.
El Gobierno municipal del PP y el señor Jaramillo, pues, han violado las más elementales normativas de toda corporación local y atentan contra su más básico funcionamiento democrático. Mas, también atenta contra la misma democracia al mentir conscientemente a los ciudadanos sobre la “Tasa de Depuración” con el objetivo de ocultarles la verdad y evitar la denuncia política ciudadana: mintió en su Bando municipal y en el Pleno del día 31 de diciembre, cuando negaba que la factura del agua fuese a subir a casi el doble, cosa que el MUP-R y el G.M. del PSOE afirmábamos y que hoy día todo el mundo ha comprobado. Además, el Alcalde ordenó tapar con su Bando municipal unos primeros carteles y mandó arrancar otros segundos en los que el MUP-Republicanos informaba de ello y pedían la “derogación de la tasa de depuración”, la “reducción del sueldo del Alcalde” y “unos impuestos justos”.
De igual forma MUP Republicanos considera que el alcalde al resolver no cumplir el plazo de alegaciones y aprobar sin aprobar por el Pleno las ordenanzas fiscales, a sabiendas que es manifiesta injusticia, podría haber incurrido en prevaricación. Actitud en la que hoy día se reafirma afirmando cínicamente que el problema “está subsanado”.
El MUP-R considera, en atención a la citada sentencia y a la justicia, que se tiene que devolver a los ciudadanos la cantidad cobrada por la Tasa de Depuración, y ante la posibilidad de que la misma pueda “tener un efecto nulo” y se tenga que “volver a aprobar en un nuevo pleno”, según el Alcalde, el MUP-Republicanos hace un llamamiento a los ciudadanos a movilizarse y acudir al mismo, si se convoca, exigiendo su derogación.
4 comentarios:
Si tan seguros estais de que a prevaricado, denunciarlo en el juzgado, y no seais bocazas y cobardes, pidiendo siempre la movilizacion ciudadana.
ese es el problema que en el pueblo nadie se moviliza,tragamos con todo y encima los que lo intentan son los cobardes arriba el caciquismo
Prevaricar es: Delinquir un funcionario público por faltar a sabiendas o por ignorancia inexcusable a las obligaciones y deberes de su cargo.
Ahora, vas y lo cascas.
Pero que demagogos sois, cuantas movilizaciones habeis pedido por los cuatro millones y medio de parados y por la subida del iva o por las mentiras de zapatero ,habiamos adelantado a italia ivamos a delantar a francia, y estamos a la altura de eslovenia.
Iros a mentir donde no os conozcan.
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